Nuestro servicio es la liturgia: en el silencio y la soledad, en la oración y la penitencia gozosa, alimentados por los sacramentos, especialmente la Eucaristía, por la lectura asidua de la Palabra, por la adoración continua. A través del trabajo de la liturgia nos proyectamos hacia lo eterno, profetizando la gloriosa alabanza que comienza en esta vida como un regalo de Dios. Nuestro servicio es mantener vivo el recuerdo, la conciencia de que bajo los rasgos desfigurados del sufrimiento está el Rostro de Jesús. En la contemplación de la Pasión del Señor vemos el amor de Dios por nosotros. Ante el Señor levantado aprendemos a reconocer en el dolor el signo del amor y a transformar todo sufrimiento en amor: el Cristo alcanzado en la contemplación es el mismo Cristo que vive y sufre en los pobres. El hombre y la mujer de hoy necesitan consuelo como siempre, y más que nunca; por eso nos ponemos al lado del sufrimiento y la desolación de este siglo como presencias silenciosas, como palabras de consuelo. Incluso cuando nos encontramos impotentes ante el dolor, creemos que a través de la oración es posible “bajar” al corazón de los que sufren para sembrar semillas de esperanza.
La presencia de nuestros monasterios está en Italia y en África.
Monasterio de Cottolenghino Adoratrices de la Preciosa Sangre de Jesús
Via del Santuario, 22
PRALORMO (TO)
Monasterio Cottolengo Jesús Sacerdote
en la Pequeña Casa de la Divina Providencia Cottolengo
TUURU – KENIA
El Monasterio de las Carmelitas
Str. Leone Fontana, 4
10133 TORINO (TO)
Monasterio del Sagrado Corazón
Via Siena, 2
00066 MANZIANA (RM)
Monasterio Janua Coeli
en el Cottolengo Piccola Casa de Biella
Via S. Giuseppe Cottolengo, 66
13900 BIELLA (BI)
Monasterio de San José
en la Piccola Casa della Divina Provvidenza de Turín
Via S. Giuseppe Benedetto Cottolengo, 14
10152 TURIN (TO)